Ubicado arriba del restaurante EM, se encuentra 686 Bar. Es un espacio discreto, elegante y acogedor, bajo la dirección del chef Lucho Martínez y de Fernanda Torres, y la colaboración de Teresa González. Parte de su encanto es su carácter casi oculto, que lo han convertido en un secreto a voces entre los conocedores. Ofrece tragos clásicos y coctelería, acompañados por platos pequeños que complementan a la perfección las bebidas. Cuenta además con una cuidadosa selección de destilados del país, además de whiskies de diversas partes del mundo y sakes. Es el sitio ideal para terminar una buena velada.